EL cerebro me hierve cuando alcanzo el collado de la Gamonal, no haber traído un gorro con el que cubrirme la cabeza ha sido hoy mi segundo error.
El primero fue no hacer caso de mi compañero e irme para la cama cuando vino a recogerme. Subir a Picos de doblete, tras una noche de fiesta, no fue una decisión muy acertada.
Y es que como muy bien dice Carlos "creéis aun que tenéis 25 años", y realmente....tiene razón je,je.
Tomamos café en el Refugio y sin apenas descanso subimos hacia la Llampa cimera bajo un sol de los llamados de justicia, agradeciendo el frescor que nos trae por momentos la brisa al atravesar los neveros cuando pasamos bajo el Porru bollu camino del Jou de los Pozos.
Avanzamos trepando por las márgenes del Jou del Requesón, intentando no pisar los neveros. Bordeando por el norte la 1ª Torre de los Poyones.
Ya bajo la pared visionamos el recorrido de la vía que vamos a acometer. El primer largo lo realizamos sin encordar, una fácil rampa de canalizos (IIIº) nos deja en una terraza donde un gran puente de roca vertical nos servirá de 1ª reunión.
Salgo de la reunión a buscar un nicho (IVº) donde hay dos puentes de roca, en la vertical se intuye la fisura que da nombre a la vía.
Comienzo a sentir los efectos de la deshidratación y la falta de sueño en forma de calambres en gemelos y contracciones de los dedos.
Decido seguir los consejos de mi compañero y bajarme, Carlos tomara el relevo, algo que le agradezco.
Desde el nicho, Carlos afronta la fisura (Vº) unas veces en Bavaresa, otras saliéndose a la placa de la izquierda. En esta, se protege perfectamente con fisureros y friends, hasta alcanzar un nicho donde se monta la reunión sobre un clavo y un spit.
Me encuentro algo mejor cuando me llega el turno de subir. La fisura, de lo mejor en su grado en los Picos. Mientras me arrastro por la pared, unos colegas del Foropicos rapelan tras hacer la "clásica", lo que me hace albergar esperanzasen que este macizo injustamente abandonado en favor del Central por los escaladores, vuelva a coger un poco de vida vida.
- Ya ....pásame el material, es la respuesta que obtengo del compañero, ante el amago de liderar el siguiente largo.
No tengo fuerzas ni para replicar.
Un corto pasaje en fisura (Vº) nada más salir de la reunión constituye la dificultad del largo.
A partir de aquí se continua por un espolón (IIIº+), un último resalte (IVº+) os deja en una terraza donde se monta reunión en dos clavos. Desde aquí realizaremos el primer rapel en el descenso. Por el filo de la cresta (IIIº) alcanzamos la cima en un par de minutos.
Viendo la cantidad de nieve que aun se mantiene en la base de la cara sur de las Cebolledas, sin piolet y en zapatillas, mañana habrá que buscar alternativa a la "Rivas -Arrieta".
Desde la cumbre destrepamos hasta la última reunión. Desde esta rapelamos con vistas a la 1ª torre hasta una amplia terraza. Un corto rapel desde un clavo (posible de reforzar en un pequeño puente de roca apenas visible a su derecha) nos deja en el collado entre ambas torres. Desde aquí un corto destrepe nos devuelve a pie de pared.
El regreso a Vegarredonda, donde vamos a vivaquear lo hacemos yendo a buscar el camino de Ordiales.
Llegados al refugio, al lado de unas cervezas, los dolores y sufrimientos de la jornada se volatizan.
Una fantástica paella y lomo con ensalada que nos sirven de cena Marta y Javi en el refugio y rapidito para el saco, que mañana será otro día.
Espero haber aprendido definitivamente la lección je,je.
Fer... estás hecho un abuelo!!!!
ResponderEliminarOtra que me tengo que apuntar como pendiente...
Abrazos para los dos...
He visto abuelos en mejores condiciones que las mías je, je.
Eliminar